Gracias.
La mujer de Mesopotamia
Hace mucho tiempo, antes de Cristo, existía una antigua ciudad: Mesopotamia. Allí había mujeres pero no se consideraban mujeres sino objetos.
El código de Hammurabi y otros datos.
Gracias al código de Hammurabi que son tablillas de barro donde se escribían leyes de la antigua Mesopotamia y las historias con la moraleja o ley aplicada de alguna manera. Fueron escritas por un rey en el S. XVIII a.C. y muchas de ellas eran sobre mujeres.
Esto hacía que supiésemos la mentalidad y las ideas de las personas. Nos demuestra que el padre o el marido era el cabeza de la familia, es decir, era el que tomaba las decisiones sobre qué se hacía y cómo se hacía. La mujeres tenían estrictamente prohibido tener relaciones sexuales con alguien que no fuese su marido, pero el hombre sí podía hacer lo que quisiese.
La sumisión de la mujer.
La mujer estaba sometido a que pertenecía a su marido o padre en casos muy raros, ya que se solían casar muy pequeñas. Cuando tenía hijos se decía que pertenecían al hombre, la mujer no pertenecía a el hombre pero en el aspecto sexual sí que le pertenecía. Si mantenía relaciones sexuales con alguien estaba seriamente castigada junto a su amante. En Babilonia se cree que las mujeres tenían algo más de derechos, pero no era seguro.
Matrimonio.
El matrimonio lo decidían el padre o los hermanos pero siempre varones. En el Código de Hammurabi decía que tenían que acordar un papel que sirviese en el caso de divorcio o viudedad.
Ponía dos cosas de gran importancia: la dote y el precio de la novia.
La dote es una ayuda que da el padre de la novia a la novia, pero lo controla el varón con el que se va a casar, y es dinero para mantener la casa, los hijos, las tierras, etc... El único inconveniente es que al fallecer los padres de la novia no recibe herencia alguna.
Por último está el precio de la novia que es el dinero, según la clase social de la novia, lo tiene que pagar el padre del novio para poder casarse con la mujer. Si el padre de una mujer decide no casarla la manda a un templo para que ejerza de sacerdotisa de un dios.
Divorcio y ruptura familiar.
Cuando un hombre se quería divorciar de su mujer podía hacerlo sin tener que dar razón alguna, pero si mantenía hijos con ella, ella se quedaba los hijos, la casa, la dote, y los derechos de la propiedad para poder mantenerlos. Incluso cuando el exmarido fallecía repartía el 50% para ella y el 50% para sus hijos.
Si la mujer no tenía hijos con su marido le daba la dote más una indemnización.
Ahora, si la mujer era la que quería divorciarse y el marido se negaba a dar la dote ahí intervenían es decir les ayudaban a resolverlo los tribunales. La mujer tenía que intentar demostrar que el marido no se preocupaba de nada, no trabajaba, sino lo hacía no se podría divorciar y el marido la mantendría como sierva o la arrojaría al río.
La protección de las viudas.
Cuando una mujer se quedaba viuda era muy duro y todos la ayudaban para que pudiese sobrevivir dignamente, cumpliendo unas de las leyes.
Para ello servían los regalos de boda que se utilizaban de salvaguardas por si fallecía el marido. Si no tiene se quedaba con la casa pudiendo vivir allí el resto de su vida. Si la mujer decidía volver a casarse podía pero tenía que dejar los regalos de boda y la casa e irse a el hogar de la familia del marido con el que se iba a casar. Pero si tenía hijos con el marido que había fallecido, tenía que pedir un consentimiento judicial para poder casarse.
El adulterio.
Era cuando una mujer casada mantenía relaciones extramatrimoniales con otro hombre, si ella quedaba sorprendida con el adulterio de su amante el marido tenía que atarlos juntos y arrojarlos al río. Si el marido quería, podía salvar a su mujer pero también lo debía hacer con el amante.
A veces e acusaban y debían hacer una prueba jurando a los dioses que eran inocentes y tirarse al río e intentar no ahogarse pues si se ahogaban eran culpables pero si sobrevivían los dioses le habían ayudado por ser inocente.
Mi opinión
Yo respecto a este tema creo que son sus leyes y creencias pero la verdad no son igualitarias. todos deberíamos ser iguales porque nadie tiene más poder que nadie y menos si son de diferentes sexos. Una mujer puede hacer lo mismo que un hombre y no debería mandar nunca un hombre en una mujer pues no tiene ese derecho, pero es su religión y hay que respetarla.
Cuando una mujer se quedaba viuda era muy duro y todos la ayudaban para que pudiese sobrevivir dignamente, cumpliendo unas de las leyes.
Para ello servían los regalos de boda que se utilizaban de salvaguardas por si fallecía el marido. Si no tiene se quedaba con la casa pudiendo vivir allí el resto de su vida. Si la mujer decidía volver a casarse podía pero tenía que dejar los regalos de boda y la casa e irse a el hogar de la familia del marido con el que se iba a casar. Pero si tenía hijos con el marido que había fallecido, tenía que pedir un consentimiento judicial para poder casarse.
El adulterio.
Era cuando una mujer casada mantenía relaciones extramatrimoniales con otro hombre, si ella quedaba sorprendida con el adulterio de su amante el marido tenía que atarlos juntos y arrojarlos al río. Si el marido quería, podía salvar a su mujer pero también lo debía hacer con el amante.
A veces e acusaban y debían hacer una prueba jurando a los dioses que eran inocentes y tirarse al río e intentar no ahogarse pues si se ahogaban eran culpables pero si sobrevivían los dioses le habían ayudado por ser inocente.
Mi opinión
Yo respecto a este tema creo que son sus leyes y creencias pero la verdad no son igualitarias. todos deberíamos ser iguales porque nadie tiene más poder que nadie y menos si son de diferentes sexos. Una mujer puede hacer lo mismo que un hombre y no debería mandar nunca un hombre en una mujer pues no tiene ese derecho, pero es su religión y hay que respetarla.